Ecologistas en Acción proponía para el día 27 de noviembre una jornada “sin compras”: el DÍA SIN COMPRA, una celebración iniciada allá en el lejano 1992, cuando todavía la mayoría de los ciudadanos no nos hacíamos eco de lo graves problemas ambientales. Como siempre, las minorías ya proponían una reflexión de este tipo. Una reflexión que apremia y se hace urgente ante una presión empresarial y mediática: “CONSUME, CONSUME, NO DEJES DE CONSUMIR….incluso como premisa inequívoca de una de las vías de solución a la actual crisis económica.
Este mensaje también subyace detrás de la “frenética actividad” de la “producción cultural, ambiental, social, educativa…” y de la mayoría de trabajos en la sociedad actual: “PRODUCE, PRODUCE,… PRODUCE….”. La cadena de producción no debe “detenerse” nunca, tanto sean bienes materiales como intelectuales. No se trata de poner en duda o cuestionar la creatividad y el trabajo, pero si de poner sobre la mesa “los excesos” que conllevan un enorme despilfarro de recursos económicos, ambientales y humanos.
Por eso la ENCINA, símbolo de constancia, permanencia,
adaptación al medio,
trabajo pausado y sabiduría.
Quizá podemos establecer nuestro propio día o días SIN,
sin compras, sin producción,…